Juego creativo e artes visuales: descubre el mundo de la diseñadora contemporánea Milena Orlandi en MADRID BLOOMS.
¿Cómo comenzaste en el mundo del diseño floral?
Yo empecé a estudiar el arte floral en 2015, un poco de coincidencia. En ese momento estaba buscando cosas creativas, que me trajeran alegría. Entonces un día una amiga me indicó un curso de introducción de flores, y así fue. Empezó como un hobby, me sirvió como terapia, y ahora aquí estoy. No estaba previsto. Cuando ví cuanto me apasionaba, es ahí que decidí que quería trabajar con esto. Al principio hacía pequeños arreglos para amigos cercanos. Mi primer trabajo fue de una amiga, que quería hacer un regalo y me encargó un bouquet. Decidí abrir el estudio cuando ya empezaban a llegar más pedidos de gente de afuera, en Sao Paulo.
¿Existen temas, colores o elementos específicos a los que te sientas atraída repetidamente en tu trabajo?
Para mí el color es muy determinante, me gustan los tonos suaves pero con contraste. Me gusta jugar con paletas de colores. También me gustan los materiales en repetición. Transformar un solo material en una masa de flores, en líneas o formas más específicas. En la escuela, aprovecho los materiales de sobra de los alumnos para reciclarlos en mis proyectos.
¿Quiénes o cuáles son tus principales fuentes de inspiración en el mundo del diseño floral?
Ikebana es una fuerte inspiración visual para mi, es una fuente de conocimiento. Toda mi carrera de arte floral siempre ha sido muy marcada por Ikebana. Es una fuente de conocimiento increíble.
¿Hay otros artistas o diseñadores, no necesariamente en la industria floral, que inspiren tu trabajo?
Soy apasionada por las artes. Cada movimiento aporta algo de interés. Por ejemplo, las paletas de colores impresionistas. Yo creo que me interesó el arte floral porque ví que en algún momento podría ser una posibilidad artística que yo nunca había contemplado, cuando ví que se podía inspirar en arte general. Me inspira mucho el movimiento del surrealismo. En realidad todos los tipos de movimientos. Pero en especial del surrealismo, me gustan René Magritte y Man Ray.
¿Cuál ha sido la experiencia de aprendizaje más significativa en tu trayectoria como diseñadora floral?
Yo creo que estar en contacto con otros diseñadores siempre trae fuente de conocimiento. Cada uno trabaja de manera distinta. Aprendes mucho de trabajar con un equipo, con otras personas. Una de las experiencias más significativas de mi trayectoria ha sido empezar a enseñar, fue una manera de aprender un poco más de mi propio trabajo. Era algo que no había contemplado en el pasado. Fue una manera de entender mejor como yo trabajo. Aprendo mucho de mis alumnos también.
¿Podrías destacar uno de tus proyectos de diseño floral favoritos y qué lo hizo especial para ti? Cuál ha sido tu último trabajo?
Al final he hecho muchos proyectos aquí en la escuela que me gustan, aprovechando materiales de las clases. Me trae mucha ilusión poder trabajar aprovechando materiales, más que pensar en una idea cerrada. Prefiero trabajar sin restricciones. No se si hay algún trabajo en escala, prefiero trabajar en pequeña escala. Me gusta trabajar de una manera más empírica. En Brasil iba mucho al mercado de flores, y me gustaba ver el material, tener esa proximidad de ver los detalles de las flores y el color. Me gusta tener contacto directo con la flor. Mi último trabajo ha sido una pequeña escultura con sobras de material de clase de los alumnos, la semana pasada. El último proyecto en el que trabajé fué la publicación del libro Spores.
"Una de las experiencias más significativas de mi trayectoria ha sido empezar a enseñar, fue una manera de aprender un poco más de mi propio trabajo."
¿Hay algún evento o cliente que destaque en tu memoria como especialmente gratificante?
Cuando tenía mi estudio en Sao Paulo, hacía todo yo. Empecé sola, iba a hacer la entrega de las flores. Justo cuando estaba empezando era yo la que entregaba, porque tenía pocos clientes. Era muy gratificante, porque acompañaba todo el proceso de alguien que quiere mandar un ramo y de represente vas a entregar el regalo y ves la cara de alegría de la persona que lo recibe. Todo este proceso era muy bonito. Me encanta traer emociones tan bonitas a las personas. Era una parte divertida y gratificante. También he hecho bodas de amigos.
¿Existen tendencias emergentes o técnicas innovadoras que encuentres especialmente emocionantes?
Yo creo que todavía sigue siendo un desafío, buscar técnicas que puedan ser una fuente de agua pero de una manera sostenible. Esto es lo que más me desafía, encontrar una forma de mantener las flores hidratadas sin hacer tanto daño al medio ambiente. Todavía hay mucho para investigar, para que se desarrollen técnicas más sostenibles.
¿Qué prácticas sostenibles específicas incorporas en tu trabajo diario como diseñadora floral?
Yo trabajo mucho con Kenzan, con piezas de Flower Frog. También con malla de gallinero. Pero también, claro, para instalaciones más grandes es más complicado encontrar formas sostenibles. Es un tema polémico, pero la industria de las flores genera bastante impacto ambiental. Tenemos que hacer algo para poder disminuir este impacto. Al final estamos trabajando con naturaleza, y hay que respetarla. Hay que concienciar a los floristas sobre este tema.
Cuando las personas experimentan tus diseños florales, ¿qué mensaje o emoción esperas que se lleven?
No sé cómo la gente vé mi trabajo. Mi trabajo para mi es el poder revisitar mi creatividad y tener la libertad de hacer cosas bonitas, experimentar. Yo lo hago porque me hace feliz. Para mí es un juego. Mi esencia. Me cierro en un mundo, para desafiar el espacio, los materiales. Espero transmitir eso, mi esencia.
Milena será una de las diseñadoras en MADRID BLOOMS el día 20 de febrero 2024.