Diseñar con flores se ha convertido en una profesión en alza los últimos años gracias a palestras como Instagram, innovación en variedades e interés de una generación de artistas que utilizan las flores como su medio de expresión. Generar ingresos y crear una empresa relacionada con las flores, ya no es exclusivo para familias dedicadas por generaciones al gremio, sino una profesión que se enseña en escuelas.
"Este programa está hecho a la medida de los requerimientos a los que un diseñador de flores se ve sometido hoy. Versatilidad, dominio de estilos y técnicas, imaginación, responsabilidad con el medio ambiente, conocimiento de la competencia, el producto."
Madrid Flower School abrió en la capital española a fin de ofrecer un espacio donde los alumnos se dejen cautivar por una multitud de flores y follaje, técnicas y colores, estilos y modas. Donde el ensayo y el error están permitidos. Donde abrimos libros de historia y recorremos galerías de arte, tanto como hojeamos revistas de moda o disparamos por el obturador.
Crear, evocar, sumergir, elevar, sacudir, romper, atar, limpiar. El glamour que transpiran las flores exige una dedicación física, emocional e intelectual. El resultado es la felicidad. Y te enseñamos a experimentarla y entregarla.